sábado, 27 de julio de 2013

EL ARTE DE LA MENTIRA "El comienzo"

- En efecto querida, soy yo, tu hermano Víctor. Ayer hablabas con Manuel, los vi algo extraños, y de pronto cunado me di cuenta, saliste caminando extrañamente del restaurante y subiste al autobús llena de lágrimas, que sucedió hermana, ¿qué te hiso ahora ese ...? 
Medite con calma sus palabras mientras en mi mente se dibujaba la imagen de aquella tarde, una y otra ves; por un segundo, guarde silencio y después conteste. 

-Gracias por tu preocupación, pero necesito trabajar, hablamos, cuando tenga la capacidad de entender, de comprender y razonar en que me equivoque, que fue lo que hice mal. 
Después de ello colgué el teléfono, pedí enseguida a mi secretaria que no me pasara ninguna llamada amenos que fuese de trabajo y de mucha urgencia; respire profundamente y continué organizando mis documentos para la junta que tendría minutos mas tarde. 
-Buenos días licenciada Villegas 
-Buenos días -salude de manera general- el motivo principal de esta reunión, es por que he aceptado la presidencia y por tanto la administración, de la sucursal de México, -con una ligera sonrisa dije - es momento de regresa a mi lugar de origen, a mis raíces. Además creo que sera una excelente oportunidad para retomar el proyecto de la exportacion de las artesanías mexicanas. 

Después de dos horas de organizacion y mostrar  los proyectos a desarrollar en México, salimos con contratos firmados, -Sera una aventura nueva para nosotros en ese tipo de mercado, pero me alegra que haya tomado la decision de aventurarse con nosotros licenciada, pero dígame, que fue lo que la convenció, hasta hace unos días, usted aun se encontraba renuente. 
-Gracias, licenciado Beltran, por sus palabras, y contestando a su pregunta, pues estuve analizando mejor la propuesta de trabajo y me convencí de que era hora de nuevos horizontes, y como dije en la junta, tambien es momento de explorar nuevos mercados, y que mejor que de mi lugar de origen, México. 

Termine mi día laboral entre felicitasiones y buenos deseos de algunos compañeros, regrese al departamento  e hise mi maleta pues partiria a la mañana sigueiente. Cuando llego la hora de dormir, los recuerdos no me dejaban en paz, lloraba y me preguntaba una y otra ves, que hise, que estubo mal, que te orillo a esa respuesta, por que no me dijiste más. La tristesa era mucha, aun no lograba comprender como es que tube la fuerza para levantarme ese día e ir a trabajar. 
Entre mi lucha por no llorar más y dormir un poco,  comense a recordar toda nuestra relacion, desde el momento en que llegaste a mi vida... 

-Almenos tu ya terminaste el trabajo, a mi me faltan algunas cosas, pero parece que tu comprendes bien esto, podrias ayudarme, por favor.  

Mati. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario